Equipos y conflictos

Al escuchar la palabra “equipo” frecuentemente imaginamos varios compañeros “sonrientes” y “unidos”, trabajando armónicamente. Esta imagen sería lo ideal para poder lograr equipos productivos dónde cada miembro, a través de sus fortalezas pudiera aportar lo mejor para el bien común.

Sin embargo, esto no siempre sucede y hasta podría decir que es muy usual que existan diferencias e incluso conflictos en equipos.

Los conflictos son parte de la naturaleza humana pues en donde existen personas que interactúan, existen ideas, puntos de vista y metodologías diferentes o bien percibidas de distinta manera, por lo tanto, poder intercambiar todos estos procesos complejos en un equipo puede generar diferencias e incluso conflictos.

Formar parte de un grupo, buscar armonía y ser productivos, es también parte de nuestra naturaleza. Como resultado, al hablar de equipos y conflictos nos enfrentamos a un tema tan complejo como la misma naturaleza humana.

¿Cuáles podrían ser los retos a enfrentar cuando existen conflictos en un equipo laboral? 

Buscar la solución, aprender de conflictos, fortalecernos como equipo o bien ignorarlos generando una “armonía superficial” que terminará en mayores desacuerdos, quizá en la pérdida de algún elemento importante o hasta disolución del grupo.

Para lograr un buen funcionamiento, estructura y un equipo productivo, se deben considerar los siguientes elementos:

- Es necesario contar con un líder que pueda identificar las características y habilidades de cada miembro y hacérselas notar, para que por mutuo acuerdo, las aplique al trabajo o tarea asignada.

- Comunicación abierta y respetuosa es otro ingrediente esencial para un equipo. Sin confianza y apertura, la comunicación de cada miembro se puede ver afectada y finalmente puede ser un principal detonador de conflictos.

- Respetar diferencias es un punto muy valioso a considerar, pues esto generará confianza para que cada uno se sienta con libertad para aportar lo mejor de sí mismo.

- Capacidad para reconocer sus errores y superarlos. Ningún equipo es infalible, ni se puede esperar esto del mismo, pero la capacidad de poder - reponerse y generar estrategias que mejoren su funcionamiento sin etiquetar culpables, será esencial para formar un equipo más fuerte.

- Finalmente, es de suma importancia no dejar ningún conflicto o diferencia sin resolver a tiempo, pues esto puede resultar en un sacó que terminará por romperse cuando todo sea demasiado pesado.

“Las diferencias son saludables y nos enriquecen mientras son aprovechadas para construir”.

Recordemos que cada situación se percibe con lentes distintos, por lo que entender la visión del otro a través del conocimiento y comunicación nos libera de conflictos y nos permite utilizar diferentes lentes ampliando el panorama.

Los equipos son tan esenciales como los engranajes en cualquier proceso productivo, por esto te invito a trabajar para lograr que éstos funcionen bien lo mayormente posible y a veces es necesario pedir ayuda para lograrlo…

En HDS tenemos programas de fortalecimiento de equipos donde, a través del autoconocimiento y las conversaciones poderosas los equipos se transforman. En estas dinámicas se logra no sólo el autoconocimiento de integrantes del equipo, sino también un mayor entendimiento de diferencias de sus miembros y sobre todo cómo conjuntarlas para lograr un equipo más eficaz y sano.

Si quieres saber más llámanos.

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Categoría: Human Development Solutions